El 4 de octubre, el Papa Francisco publicó su exhortación Laudate Deum, exigiendo acción climática a raíz de las respuestas inadecuadas a Laudato Si de 2015. En Laudate Deum, dirigido “a todas las personas de buena voluntad”, el Papa Francisco reitera que el cambio climático es un problema social causado por el ser humano con implicaciones para la dignidad de la vida humana y cita hechos científicos para refutar a quienes niegan el clima, como las estadísticas que muestran máximos históricos en la concentración de carbono en la atmósfera, el calentamiento de la temperatura y el aumento del nivel del mar. Pone la responsabilidad de esta crisis en los países ricos y defiende a las mujeres y niños pobres cuyas emisiones son mínimas.
Laudate Deum presiona por la coordinación global para crear acuerdos multilaterales con mayor eficacia, pidiendo una transición energética vinculante de la 28ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28). El Papa Francisco también dedica una sección a “reconfigurar el multilateralismo” desde abajo, involucrando a la sociedad civil para reparar las deficiencias de la comunidad internacional. En particular, condena el énfasis en los enfoques tecnológicos que priorizan el poder económico sobre las personas y el planeta y advierte contra la dependencia total de la tecnología para las soluciones climáticas.
Los compromisos de los Servicios de Inversión de la Misericordia, guiados por el asunto crítico de las Hermanas de la Misericordia por la Tierra, apoyan el llamado del Papa Francisco a la acción climática junto con el movimiento global hacia una economía más sostenible. Servicios de Inversión de la Misericordia, a través de un enfoque múltiple de la inversión socialmente responsable, se compromete actualmente con más de 70 empresas en cuestiones relacionadas con la salud del planeta, señala su compromiso con la creación a través de la votación intencionada de los puntos relacionados con el clima en las votaciones anuales, y dedica partes de su cartera a inversiones en personas y comunidades afectadas por la crisis climática a través del Fondo de Cooperación con la Misericordia y en soluciones a la crisis climática a través del Fondo de Soluciones Ambientales.